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Criptomonedas: ¿cómo desde la autenticación digital y KYC se puede prevenir el fraude digital?

Criptomonedas: ¿cómo desde la autenticación digital y KYC se puede prevenir el fraude digital?
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November 27, 2022

Autor: Jaime Ramirez, Founder and Ceo Preventor

Ha llegado el momento de despejar los nubarrones que le quitan claridad a estas operaciones en criptomonedas y actuar decididamente contra los fraudes digitales.

El fraude a través de criptomonedas está disparado y en este contexto la adopción de sistemas de autentificación digital representa un factor determinante para el éxito o el fracaso de muchas plataformas que necesitan con urgencia conocer a profundidad a los clientes que realizan operaciones en su red, mientras al mismo tiempo luchan contra el lavado de activos y fortalecen sus políticas para cumplir con la estricta normativa internacional.  

A pesar de que las criptomonedas representan una revolución financiera al descentralizar las finanzas y ofrecer acceso a más personas, este mercado está altamente expuesto a delitos como el fraude, por lo que la autenticación digital y unas políticas claras de Know Your Customer (Conoce a Tu Cliente) entre los distintos actores que trabajan en este negocio es clave para poder mitigar el riesgo asociado a estas operaciones. 

El fraude digital es un aspecto crítico en el negocio de las criptomonedas, puesto que impacta directamente a las empresas y mina la confianza en ese mercado. Quienes son víctimas de estos ataques sufren perdidas inmediatas, producto del robo de identidad y otros delitos asociados. La dimensión del problema es enorme puesto que hasta mediados de este año los hackers habían logrado robar el equivalente a unos US$2.000 millones en criptomonedas, mucho más que lo que habían alcanzando en el mismo período del año pasado (US$1.200 millones).

Para lograrlo, activan sus estrategias maliciosas por medio del robo de la identidad de los usuarios de estas plataformas o explotan las vulnerabilidades de la herramienta, muchas de las cuales parten de frágiles procesos de onboarding y malas prácticas de KYC. 

Precisamente, los vacíos regulatorios están entre los principales desafíos para la expansión global del negocio de las criptomonedas, lo que ha dado pie a que poderosas organizaciones criminales se aprovechen de estas lagunas para realizar millonarias operaciones de fraude digital en todo el mundo al margen de la lupa de las autoridades. Pero, ¿cómo resolverlo?

La confianza cimienta la seguridad

Ante estas amenazas cada vez parece haber mayor consenso sobre la necesidad de poder generar un mayor control global sobre este mercado para luchar contra el crimen organizado y al mismo tiempo mitigar el riesgo, en medio del llamado criptoinvierno que azotó a los inversores este año con el descalabro en mayo de la plataforma Terra y su token asociado Luna, y ahora con la declaración de bancarrota del exchange FTX, fundado por el millonario Sam Bankman-Fried.

En este contexto tan desafiante, la Unión Europea ya ha dado pasos firmes para regular el mercado global de criptomonedas a través de la ley Markets in Crypto Assets (MiCA), con la que pone luz sobre las transacciones que se realizaban de forma anónima al obligar a las plataformas que prestan servicios de billetera digital o intercambio a aplicar políticas de KYC. 

Estas medidas podrían ser determinantes para combatir los flagelos del fraude digital y el lavado de activos a través de criptomonedas, un delito que el año pasado les permitió a los criminales blanquear US$8.600 millones o un 30% más frente a 2020, de acuerdo a cifras de Chainalysis. Y como la actividad de los criminales no para, las plataformas del mundo cripto no pueden quedarse cruzadas de brazos y deben actuar desde ya.

 

En Latinoamérica, por ejemplo, la Oficina de las Naciones Unidas contra la Droga y el Delito advirtió sobre cómo los cárteles mexicanos están realizando operaciones en bitcóin para poder soportar su actividad criminal de venta de drogas y lavar cerca de US425.000 millones al año en ese país, ayudados por esta y otras modalidades.

La autenticación debe ser el pilar 

Ante el auge global de los fraudes digitales, las plataformas se ven retadas a realizar inversiones y cambiar su estrategia para proteger a sus usuarios de ataques cada vez más sofisticados que apuntan en especial a los protocolos de finanzas descentralizadas (DeFi), que muchas veces son vulnerables a estos delitos al ser de código abierto.

Para mitigar estos riesgos las empresas deben ir un paso adelante al integrar sistemas de monitoreo que les permitan hacer un seguimiento completo de las transacciones, lo que podría poner en evidencia comportamientos anómalos dentro de las plataformas que a diario tienen que gestionar grandes volúmenes de operaciones.

Desde la óptica de Preventor, la autenticación de múltiples factores debería ser una prioridad para estas plataformas para poder garantizar la fiabilidad en las inversiones cripto y afianzar su expansión en un entorno más seguro, en el que el conocimiento profundo del cliente debe estar en el centro de la estrategia. Pero para comenzar a generar estos cambios hay que identificar en dónde están las principales brechas de estas plataformas.

Las criptomonedas se soportan bajo la infraestructura de blockchain, lo que permite que todas las operaciones queden registradas en un tipo de libro abierto y cuenten con toda la trazabilidad de extremo a extremo. Esto les permite a los usuarios tener certeza de que la transacción no va a ser interceptada o hackeada, un modelo similar al SWIFT internacional que usan los bancos.

Si bien blockchain es seguro y ofrece ese blindaje, los riesgos se comienzan a materializar en las plataformas digitales que sirven de puente para dichas transacciones, operadas en su mayoría por fintechs y otras entidades financieras. Y es que, al usar dichos servicios, los usuarios deben crear una cuenta, registrarse y delegar su seguridad al dispositivo para poder abrir la aplicación móvil por medio de la autenticación en dos fases (2FA). 

El mayor riesgo para los usuarios se genera al ingresar a dichos aplicativos, puesto que al delegar la seguridad al teléfono lo que se blinda es el acceso a esos dispositivos móviles, mas no las transacciones monetarias, con lo que las personas quedan expuestas.

Preventor entra a solucionar estos vacíos desde el onboarding digital y las prácticas de KYC, integrando autenticación biométrica con reconocimiento de voz y detección de rostros, tecnologías que en la actualidad también están soportadas en la inteligencia artificial y la automatización para rastrear por medio de algoritmos diferentes tipos de fraude (Liveness detection).

Estas herramientas entran para remplazar soluciones como la autenticación en dos fases u otros mecanismos como Google Authenticator, que, si bien son ampliamente usados en la actualidad, a su vez, son altamente vulnerables y son fuente de la mayor cantidad de fraude digital.

No es momento para ceder

La dinámica del fraude digital obliga a las plataformas a replantear lo que se viene haciendo, cambiando sus estrategias en materia de seguridad para evitar la fuga de usuarios en medio del criptoinvierno que ya ha golpeado fuertemente la reputación de este mercado.

Específicamente en los mercados emergentes, la Conferencia de las Naciones Unidas sobre Comercio y Desarrollo lanzó una reciente advertencia sobre la evasión de impuestos asociada a las transacciones en criptomonedas a través de lo que calificó como flujos financieros ilícitos, haciendo el símil con los paraísos fiscales.

“De esta manera, las criptomonedas también pueden frenar la efectividad de los controles de capital, un instrumento clave para que los países en desarrollo preserven su espacio político y su estabilidad macroeconómica”, advirtió en un reporte sobre esta temática. 

Con los ojos de los reguladores encima en estos tiempos difíciles para las criptomonedas, las plataformas no deben dar ventajas y por ello es importante que se adapten a esta nueva realidad que les presiona a tener mayor rigurosidad en la forma en la que realizan la incorporación de clientes, gestionan sus transacciones, monitorean esta actividad y evitan el riesgo de fraude.

Fallar en este momento puede ser fatal para la sobrevivencia de estas plataformas y sobre todo para la confianza en el mundo cripto, que está llamado a soportarse en la tecnología que le ha dado origen para ofrecer un entorno seguro para todos, en el que las políticas de KYC estén en el centro de su negocio y en el que la seguridad sea un pilar fundamental para blindarse de las actividades ilícitas que le están haciendo tanto daño a este ecosistema. La buena noticia es que aún están a tiempo de hacer estas transformaciones.

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